Se eleva la incidencia de enfermedades sexuales | Diario.com.mx: Edición Cd. Juárez

Entre la basura y un pestilente olor a suciedad, “Adriana” dice que espera la muerte en ese picadero. Desde los 7 años ha sido consumidora de drogas y para conseguir una dosis tiene que prostituirse.

Ella es parte de la población de Juárez con más alto riesgo de contraer enfermedades como el VIH, hepatitis B y C, por el uso de jeringas sin control. Hasta la calle Mercurio, en la colonia Barrio Alto, llegaron los federales, “me exigieron dinero o que les hiciera sexo oral, o me iban a poner presa. Como vi que golpearon a otros chavos que estaban consumiendo, hice lo que me dijeron; si a ellos no les importa si tengo Sida, a mí menos”.

Ahora, relatan los promotores de salud, hay las sexoservidoras de La Paz, las de las barras de los bares, las chavas de las salas de masajes, las ejecutivas que negocian por celular y un hombre las entrega y recoge en una camioneta, las trabajadoras de las maquiladoras, que “con eso completan el gasto”, y ante la crisis, muchas mujeres que se quedaron sin empleo recurren a este oficio para mantener a sus familias.