La pérdida de la tolerancia al alcohol y las drogas se da después de un periodo de abstinencia, entonces los efectos de la sustancia suelen ser más fuertes. “Si antes de dejar el alcohol necesitabas de 10 bebidas para emborracharte, puede que las sigas tomando antes de darte cuenta de lo fuerte que son sus efectos ahora”.
Por ello los primeros días que siguen a una rehabilitación son los más peligrosos debido a la disminución de la tolerancia y la posibilidad de una sobredosis. Un consumo excesivo de alcohol puede ocasionar intoxicación y muerte, sin embargo el nivel que puede soportar el cuerpo es distinto para cada persona.
Factores como edad, peso, género y consumo previo determinan la resistencia a esta sustancia. “Con una alcoholemia de 4 g/l, una persona que no bebe regularmente cae en coma etílico y puede morir. Sin embargo el alcohólico crónico soporta mucho mejor las dosis muy fuertes: algunos son capaces de conducir con cantidades similares”. Mas......