Casi un tercio de los españoles con VIH es diagnosticado y tratado cuando la enfermedad ya está en fase avanzada, según. europapress.es

Las principales consecuencias de un descubrimiento tardío de la infección son la falta de efectividad y la mayor toxicidad que muestran los tratamientos antirretrovirales, el aumento de la tasa de mortalidad -- hasta el 77% de los fallecimientos asociados al sida pueden estar derivados de un diagnóstico en fase avanzada-- y el incremento de transmisiones a personas no infectadas debido al desconocimiento del paciente sobre su enfermedad.
"Los afectados responderán peor al tratamiento y es más probable que transmitan el virus a otras personas. Dada la gravedad de este asunto en Europa Occidental, es imprescindible que tomemos medidas urgentes que contribuyan a ampliar el diagnóstico y tratamiento precoz del VIH, y a reducir el estigma que existe entorno a esta enfermedad".
En Europa, entre el 15 y el 38 por ciento de los pacientes VIH positivos es diagnosticado y tratado cuando la infección ya ha evolucionado a sida. A pesar de estas cifras, a nivel europeo no existe una definición "estándar" de manifestación tardía de la enfermedad ni guías clínicas que indiquen a los profesionales cómo actuar ante estos casos, comentó el jefe del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Ramón y Cajal, el doctor Santiago Moreno.