Es importante que antes de embarazarse o dar de amamantar a sus hijos, todas las mujeres se hagan las pruebas para descartar la presencia del VIH en sus cuerpos, pues los niños con VIH* requieren de cuidados especiales en cuanto a la administración de vacunas, pues al ser éstas compuestas por virus atenuados de enfermedades como la polio o tuberculosis, pueden causarles la muerte.
En caso de ya estar embarazada, se puede seguir un tratamiento para que el niño no se infecte, pero no se debe darle leche materna ni vacunarlo de la BCG y la polio por ser contraindicadas.
*Segun el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas y Alergias de EE UU, anualmente cerca de 500.000 niños nacen con la infección.
Martha Correa
